Viviendo Universidad. Residencias. Piso

"Trabaja, en algo, para que el diablo te encuentre siempre ocupado" San Bernardo.

Pese a que siempre me han gastado bromas del tipo " porque tu te llevas muy bien con el diablo ¿no?" ¿a ti te gusta el diablo ¿no?" por mi estética muy cercana al personaje "Emily the Strange", ¡y qué demonios! algo de verdad había. ¿no? Últimamente no tengo tiempo ni para comprar respirar.

Al haber tenido problemas con la Residencia Alfonso Viii, y pese a que no podían echarme por ser estudiante de arte dramático, decidí que estaría mejor en un pisito de estudiantes compartido y no en un sitio que suelta perlas como "es que no consideramos estudiantes a los que cursan arte dramático" (que yo me pensaba para mi misma, " no claro es que la Escuela  es como High School Musical... vente conmigo un martes que entro a las 9 y salgo a las 21.."). Ciertamente, los pisos si tienes suerte están casi mejor que las residencias ya que son más económicos, por regla general, no tienes problemas de horarios (ni de comidas ni para salir), puedes quedar tranquilamente con tus amigos, traer a tu familia sin presiones, etc... 
La pega: que lo haces tu TODO. 

En la residencia que estaba yo, la limpieza no corría por mi cuenta, sino que tenía servicio de limpieza pero tenía que hacer la compra de la comida, ect porque la residencia no tiene servicio de comidas y los horarios del comedor de pago no me venían nada bien porque nada más servirme el plato tenía que marchar a coger el bus para la escuela y por la noche llegaba tarde. Ahora, en el piso, nos repartimos las tareas de la casa para aliviarnos el trabajo y evitar injusticias, pero también hay que hacer la compra. Por lo que, bye bye tiempo¡¡
Como es obvio todo tiene su punto bueno y su punto malo, pero no me arrepiento de estar aquí, cuanto mejor que en la Residencia...

En la Escuela hemos empezado ya con reuniones de delegados, trabajos, escenas, fechas de exámenes  muchos apuntes... y los típicos proyectos que salen en estas carreras relacionadas con compañeros etc... Es decir, ahora me cuesta encontrar el tiempo" para comprar el pan"... Sin embargo, y pese al cansancio cada noche te acuestas en la cama, sin pensar si el colchón es bueno o malo, y con una sensación de satisfacción increíble ya que haces tantas cosas al día y tan productivas que, si realmente te apasionan, aunque sean trabajo quedas maravillado por lo rico que es el día cuando se acaba comparándolo con lo pobre que comienza.

Para sincerarme, diré que debería haber arreglado la bici casi hace un mes.... la arreglaré mañana y esta vez si que es verdad. Ya fotografíe el cómo ir? de Google, puesto que mi móvil no tiene GPS. Soy una de esas extrañas personas reacias a los móviles android.

Las horas de sueño me atacan como la Erinnias atacaban a Orestes...